​

 

 

En nuestro mundo global, las migraciones debido a los conflictos bélicos y a situaciones de carestía mínima y básica, son una constante en nuestro día a día. Los medios de comunicación nos hacen partícipes del sufrimiento y desespero de todas las personas que intentan salir de sus países en guerra o en extrema pobreza para conseguir cambiar su futuro y sus expectativas futuras para ellos y sus familias.

 

Por otro lado también somos testigos de la creciente resistencia de muchos países prósperos para permitir la entrada de todas estas personas. Construyendo muros y barreras, decretando leyes donde no se permite la entrada a un país a determinadas personas de una religión, etnia u origen. Cada vez son más las personas que desean salir de sus países y cada vez son más los países que impiden la entrada a refugiados de otros países.

 

Esto despierta en nuestra memoria esas épocas en las que, en nuestros países, la necesidad de emigrar era una constante, una costumbre y una necesidad para muchos inevitable. Jóvenes, de muy corta edad, que salían de sus pueblos para buscar un futuro mejor, muy lejos de su lugar de nacimiento, sabiendo que quizás no regresarían nunca más.

 

Para poder salir de un país siempre ha sido necesario un visado, un salvoconducto.

Los que poseen un permiso, una autorización, muchas veces en forma de documento en papel, les será permitido poder viajar, emigrar e incluso instalarse en otros lugares para vivir.

¿De que depende que a unos y no a otros se les permita poder circular libremente? ¿Qué nos separa y nos hace diferentes para poder ser válidos y aceptados por los demás?

¿Cuál es el valor simbólico de estos documentos?

 

Este proyecto va del valor que se le da a unos y a otros a partir de los documentos identitarios, y de la libertad que en cambio tenemos todos, para soñar.

 

Parto de un documento, un pasaporte de mediados del s.XIX, que se adjudicaba y permitía viajar a las personas que deseaban salir de las posesiones de Ultramar hacia España.

El documento proviene del Arxiu Històric de Sitges.

 

Agradecimientos a Xavier Miret i Mestre, Director del Arxiu Històric de Sitges.

​

El vídeo de este proyecto participó en el Congreso Musapalabra- Culturas en Diálogo-Emigración 2018-2019